Ruta del carrilet. Vía Verde Olot - Girona - Sant Feliu de Guíxols
Hoy pedaleamos de los Pirineos a la Costa Brava. De Olot a Sant Feliu de Guíxols, pasando por Girona. La Ruta del Carrilet de las Vías Verdes de Girona es perfecta para descubrir los paisajes de la provincia de Girona desde una perspectiva más natural y verde.
Son cerca de 100 km de vía verde que puede hacerse a pie o en bicicleta; podéis elegir explorar la ruta por tramos o hacerla de una sola tirada en dos o tres días. Si estáis interesados en esta última opción, consultad los paquetes turísticos que ofrece Costa Brava Verd Hotels.
Pero antes de subir a la bicicleta, echemos un vistazo a la historia del recorrido por el que pasaremos. El sendero es la antigua ruta del Carrilet que iba de Olot a Girona, y luego de Girona a Sant Feliu. En los años 60, el antiguo Ferrocarril dejó de funcionar debido a su mal estado y difícil mantenimiento después de la Guerra Civil. La vía quedó abandonada hasta los años 80 cuando se decidió re-abrirla para crear una vía verde para ciclistas y senderistas.
En los últimos años, las vías verdes de Girona se han hecho más populares y hoy día son un lugar habitual de paseo. Se trata de un camino de tierra muy bien acondicionado para ir en bicicleta y con muy poca dificultad. Si queréis hacer la ruta del ferrocarril completa, es importante que comencéis en Olot para que el viaje sea de bajada y, por lo tanto, más agradable y fácil.
Si empezáis en Olot, echad un vistazo al Hotel – Apartament La Perla, un hotel céntrico y perfectamente ubicado para salir del hotel en bicicleta e ir haciendo vía hacia Girona (ubicado a sólo 500m de la Vía Verde)
Veamos ahora en detalle las dos grandes etapas de la Ruta del Carrilet de la Vía Verde:
RUTA CARRILET 1. DE OLOT A GIRONA. 57KM
Iniciamos la ruta en las Fuentes de Sant Roc de Olot, muy cerca de la antigua estación de tren. En este primer tramo pasaréis por bosques frondosos y atravesaréis la Zona Volcánica de la Garrotxa.
Si no tenéis prisa, haced una visita corta al Parque de Pedratosca y desviaros en el pueblo de Hostalets de Bas para hacer una parada bucólica de café con leche y “coca” de azúcar.
Aunque de los Pirineos a la Costa Brava el camino es de bajada, si que es verdad que en este primer tramo saliendo de Olot notaréis una pendiente suave; deberéis atravesar el cuello de Bas (620m y un desnivel del 1,5%) y luego ya el camino será todo de bajada..
En Les Planes, y a pie de bicicarril, encontraréis el hotel Can Garay, un hotel totalmente bike-friendly donde podréis hacer noche si estáis cansados o deseáis hacer un tramo corto. En esta zona menos conocida de la Garrotxa abundan los saltos y pozas: si queréis hacer una excursión por la zona, acercaos al Molí d’en Murris y al Gorg de la Plana.
La siguiente parada destacable es Amer. Allí veréis la antigua estación de tren y muy cerca encontraréis la Font Picant, una fuente donde el agua sale gasificada de forma natural. ¡Una parada ideal para retomar fuerzas! Muy cerca tenéis la fábrica de Fonter, famosa por su agua con gas.
El tramo de vía verde sigue junto a los ríos Brugent y Ter, en dirección Girona ciudad. Un camino plácido por el valle del Ter donde seguiréis hacia Anglès, Bescanó y finalmente entraréis en Girona, siguiendo las buenas indicaciones del carril bici; primero pasaréis por las huertas de Girona y finalmente entraréis ya en la ciudad.
En Girona haced noche para descansar y retomar fuerzas. Las necesitaréis para continuar al día siguiente hacia Sant Feliu de Guíxols. Tenéis dos hoteles estupendos donde pasar la noche, ambos situados en el centro histórico de Girona:
• L’Hotel Peninsular, un hotel de 3 estrellas, moderno, muy céntrico y con las comodidades esenciales para pasar unos días en Girona. Lo mejor de todo, su ubicación: justo delante del Puente de Piedra.
• L’Hotel Carlemany, uno de los hoteles de más renombre en la ciudad de Girona con un diseño muy moderno. Encanto, arte, comodidad y exclusividad, se suman a una propuesta culinaria excelente por el chef Xavi Arrey.
RUTA CARRILET 2. GIRONA - SANT FELIU. 40KM
Este segundo tramo es casi plano y más corto que el anterior. De Girona a Sant Feliu encontraréis numerosas referencias a la antigua vía de tren, hoy recuperada para hacer una vía verde muy frecuentada. Décadas después de ser abandona, la vía del tren vuelve a comunicar y enlazar los pueblos de Cataluña.
Saliendo de Girona, la ruta atraviesa la depresión de la Selva, caracterizada por un paisaje en mosaico con alternancia de cultivos y bosques. Los días más claros tendréis una panorámica extraordinaria de los Pirineos hasta el Montseny, pasando por los relieves de costa de la Cordillera Transversal (el Far, Sant Roc, Rocacorba).
En la web de Vies Verdes ya nos avisan: "El recorrido está formado por una línea sinuosa matemáticamente trazada sobre el territorio". Efectivamente, el itinerario muestra un recorrido singular, lleno de curvas durante los primeros kilómetros y subidas y bajadas muy suaves.
A continuación, atravesaréis el valle de Ridaura, que separa el macizo de Cadiretes, al sur, del macizo de las Gavarres, y que, con un suave desnivel, nos facilita la llegada al mar justo en Sant Feliu de Guíxols. Una vez allí, poner los pies en remojo en las playas de Sant Feliu será una idea brillante.
Por el camino, más que recomendable que os paréis (al menos para estirar las piernas) en diversas poblaciones destacadas que encontraréis por el camino. La primera parada: en Quart, famosa por su cerámica.
En Llagostera descubriréis un centro histórico muy bonito y en Castell d'Aro podréis visitar su núcleo medieval.
¡Buen viaje!